La depresión y el estrés afectan nuestra salud emocional y generan todo tipo de consecuencias, como la falta de productividad en el trabajo y en las aulas, dolores musculares, disminución de la autoestima, aumento de la ansiedad y otros problemas graves, que van desde la pérdida de apetito (con lo que se originan otras enfermedades), daño neuronal y hasta la muerte. Tener una salud emocional óptima significa que puedes comprender, superar y controlar estos problemas. Una persona con buena salud emocional es consciente de sus pensamientos, sentimientos, emociones, rutinas y comportamientos, capaz de hacer frente al estrés y a otros problemas que forman parte de una vida habitual. Además, poseen relaciones saludables con quienes los rodean. Las emociones afectan directamente a tu organismo. Una persona muy ansiosa puede sufrir de presión alta o úlcera estomacal. Las emociones son respuestas psicofisiológicas que luego se transforman en sentimientos. Por ende, funcionan como “descargas” e